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La decisión de Sophie


Burdeos, sur de Francia; diciembre de 2013:

Sophie: Papá, quiero contarte lo que me gustaría hacer cuando termine el instituto.
Papá: Dime, Sophie, ¿qué te gustaría hacer?
S: Pues antes de empezar la carrera me encantaría trabajar un año como voluntaria de una ONG en algún país de África, en uno de ésos donde las personas emigran para buscar una vida mejor, donde los que tienen la suerte de trabajar lo hacen explotados por sus patronos, donde las condiciones sanitarias son precarias y excluyentes, donde mucha gente no tiene acceso a una vivienda digna, donde muchos niños pasan hambre, donde sus ciudadanos viven bajo el yugo de una oligarquía corrupta, en un país donde ni siquiera puedan protestar por sus miserables condiciones de vida. ¿Sabes, papá?, quiero hacer algo por esas personas, lo que sea. Cualquier cosa antes que quedarme de brazos cruzados, o mirando para otro lado, como si no pasara nada.
P: Es un noble propósito, preciosa, pero para eso no hace falta que vayas a un país africano. ¿No has pensado en ir a España? Te quedaría mucho más cerca.

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